- Iniciamos una ronda de contactos con todos los grupos políticos del Congreso de los Diputados.
- Consideramos que las nuevas medidas afectan a la libre competencia y debilitan a las comercializadoras independientes.
- Feníe Energía propone reformas más justas para las comercializadoras eléctricas independientes en el Real Decreto-ley 6/2022 sin que perjudiquen al cliente final.
Feníe Energía ha iniciado una ronda de contactos y reuniones con todos los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados de cara a la próxima tramitación del Real Decreto-ley 6/2022, por el que se adoptan medidas urgentes para hacer frente a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania.
Un Real Decreto-ley que, junto con el acuerdo alcanzado este martes entre España y Portugal y la Comisión Europea para el topado del gas, incluye medidas encaminadas a la rebaja de la tarifa de luz que afectan al mercado eléctrico y que pueden suponer, a medio y largo plazo, el debilitamiento de las empresas independientes de comercialización de energía y el refuerzo de la posición de dominio de las grandes compañías del sector.
Sin libre competencia, el consumidor estará aún más indefenso frente a un mercado dominado por las grandes compañías. Por ello, Feníe Energía, que comparte la necesidad urgente de abaratar el precio de la electricidad, quiere trasladar a los grupos parlamentarios varias propuestas de mejora en la regulación final prevista por el Real Decreto-ley 6/2022.
“Esperamos que tanto el Gobierno como los grupos Parlamentarios entiendan que las decisiones que han de tomarse para bajar el precio de la electricidad pueden tener consecuencias a medio y largo plazo en el mercado eléctrico y que, en función de la forma en que se adopten, podrían resultar lesivas a la larga para los intereses de los consumidores, al debilitar a las empresas que generamos una verdadera competencia en el mercado”, explica Javier Bescós, director de regulación e innovación de Feníe Energía.
Entre otras medidas, Feníe Energía propone que el bono social eléctrico se financie, al igual que el bono térmico del gas, con cargo a los Presupuestos Generales del Estado. Tal y como se plantea actualmente en el Real Decreto-ley, este bono social fomenta la inseguridad jurídica, añade dificultades a las energías renovables, castiga a las comercializadoras y reparte injustamente la solidaridad hacia los más vulnerables, cargando igual a una vivienda que a una industria.
Por otra parte, abogamos también porque las grandes compañías distribuidoras estén obligadas por ley a una lectura real y habitual de los contadores de la luz cuando la potencia contratada supera los 15kW. Con esta medida, se evitarían retrasos y acumulaciones de facturas pendientes, con el lógico perjuicio a los consumidores finales. Feníe Energía recuerda que las comercializadoras que emiten las facturas, dependen de la información que les suministran las distribuidoras y, al contrario de lo que piensan muchos clientes finales, no causan estos problemas, sino que los sufren también.
Además, Feníe Energía considera que se debe normalizar inmediatamente la tarifa regulada del gas, toda vez que se ha superado la urgencia provocada por los meses más fríos del invierno. Mantener esta medida en el tiempo, como recoge el Real Decreto-ley, distorsiona el mercado del gas a favor de las grandes compañías, pone en riesgo la viabilidad futura de las tarifas reguladas y acumula un déficit que puede resultar difícil de asumir en el futuro.
Por otra parte, pedimos que se regulen las subastas de energía de los operadores dominantes de generación. No es posible que se siga permitiendo y fomentando que la energía de los operadores dominantes solo sea vendida a las comercializadoras de su mismo grupo. El propio Gobierno es consciente y por eso el RD 17/2021 de septiembre 2021 exigía crear un mecanismo para que parte de esa energía se vendiera en libre competencia a las demás comercializadoras. La CNMC publicó su informe sobre la metodología de cálculo de las subastas a principios de febrero y, pasado este trámite, es urgente para la libre competencia que se pongan en marcha estas subastas.
Compensación al topado del gas
En relación al acuerdo alcanzado el pasado martes con la Comisión Europea para limitar el precio del gas hasta 50 euros el megavatio hora, Feníe Energía quiere mostrar su preocupación sobre cómo se articulará este mecanismo de compensación entre todos los actores del mercado eléctrico.
La fórmula propuesta por el Gobierno aboca a las comercializadoras independientes a tener que repercutir a los clientes finales unas cantidades que serían siempre imprevisibles, al depender del precio puntual del gas. Una situación que haría prácticamente imposible ofrecer precios fijos y condiciones estables a los consumidores e impediría la competencia con las grandes compañías productoras y sus propias comercializadoras.
Por ello, Feníe Energía defiende que esta compensación provisional en el tiempo se articule mediante un nuevo concepto regulado en la factura de la luz, lo que permitiría, que su aplicación fuese transparente y que la CNMC pudiera controlar su correcta aplicación a los clientes y también su eliminación cuando finalice esta medida temporal.